Hace no mucho me dieron tres pistas para saberlo, y yo comparto mi experiencia para las interesadas, para que veáis que soy altruista:
1. Mi hermana, la enana, por primera vez desde que tengo 20 años, que se dice pronto, VEINTE AÑOS, dejó de escribir en la tarjeta de cumpleaños dedicatorias «lindas» y transcribo literal: «quiero un sobri ya», » a ver si espabilas, que el sobri nunca llega», «estoy harta de decírtelo bien cada año: QUIERO UN SOBRI YA, COÑO», «Ejem, ejem, tic, tac, suena el reloj», «Vaya mierda de hermana mayor que no contenta a su hermana pequeña, sigo con la causa: QUIERO UN SOBRI YA»…
¿Se hacen una idea de la presión a la que me veía sometida y me resbalaba cada año que pasaba, todo hay que decirlo?
Pues bien, tras años y años de mensajes «subliminales» y «delicados» donde los haya, llegó la felicitación de este año: «Tranqui, ya no te agobio. Ya no es que se te pase el arroz, es que está pocho. Perdí la esperanza de tener un sobri ya, coño».
Ten familia para esto.
¿Y pensar que le cambié los pañales con estas manitas, pero y si las hubiera usado de otra manera?.
2. Por primera vez en mi vida me he teñido y tan sólo hace un par de meses. Jamás fui de ésas que se echan henna, que si prueban este peinadito o el otro, además odio que desconocidos me soben y encima tener que pagar por ello. Y es realmente traumático pagar 40 euros, que bien empleaditos estarían en unas cañas, para salir de la peluquería pareciéndote a una copia barata de la Beckham, a las horas de haber salido del suplicio a un dibujo barato manga, y a la mañana siguiente a Julia Otero en los ´80.
Y todo esto por unos módicos 40 euros, oigan, que me lo quitan de las manos, oigaaaaaaaaaan. Es que estaban de rebajas. JÁ.
No sé si se han percatado, todo adjetivo añadido al look del momento es BARATO.
¿Alguien se ha dado cuenta de que empiezo a tener raíces ya?
3. Ahora viene lo traumatizante de verdad, la refinitiva, la que te jode viva, lo mejor dejado para el final, de la que no te levantas ni recuperas y espero que no te toque nunca. Me da hasta cosa reconocerlo, pero allá va, la sinceridad ante todo:
SÓLO ME ENTRAN CINCUENTONES, o gente que se auto describe como un «chico de 49 años».
Hay que joderse.
¿Y yo que me siento como si tuviera 18 años y lo que es peor, vivo como si los tuviera?